"El mayor logro de RNV es su credibilidad"

Helena Salcedo, directora de Radio Nacional de Venezuela

Luis Tovías Baciao

No son pocos los que en algún momento del ajetreo diario, bien en casa, en el trabajo o en el carro, escuchan parte de la programación de Radio Nacional de Venezuela (RNV). Y es que sus seguidores, no sólo los de estos tiempos sino también los de varias generaciones, mantienen una afinidad casi religiosa con dicho medio. Por tal razón, desde los abuelos hasta los niños fieles a la señal celebran sus 73 años de existencia.

Sin embargo, la RNV del siglo XXI posee heterogéneos factores para ser hoy por hoy uno de los medios de comunicación del Estado con más empatía hacia sus usuarios. Uno de ellos, el factor humano. Y dentro de éste, es imposible dejar de nombrar a una de sus piezas clave: su directora, Helena Salcedo.

Hablar de Helena Salcedo es hablar de toda una vida dedicada al periodismo y a la comunicación social de una manera lúcida. Incluso, muchos de los que son contrarios a sus enfoques políticos e ideológicos admiten tal cualidad en sus andanzas por salas de redacción, cabinas de radio y televisión. Otros la recuerdan más por sus posiciones reivindicativas cuyos mayores revuelos se evidenciaron en el Diario de Caracas de Marcel Granier.

Salcedo apartó un espacio de su apretada rutina para conversar con LA CUMBRE sobre los logros y anécdotas de estos años al frente de RNV, también sobre la comunicación y el periodismo. En su oficina, con una docena de cuadros con fotografías del presidente Chávez en diferentes actividades y un escritorio colmado de papeles, libros y bolígrafos, asegura que el periodismo tiene que ser crítico o pierde su esencia; inclusive, "si esa crítica molesta a un alcalde o a un gobernador de la misma revolución, pues que se ponga bravo".

Logros
Para Salcedo lo más significativo de los últimos años es la ganancia de un espacio importante de credibilidad en la población venezolana; además de haber "sacado del foso" a RNV, que junto a Venezolana de Televisión (VTV) "estaban próximos a ser vendidos para formar parte de un grupo de empresas privadas inclinadas a Acción Democrática y Copei".

Expresa que antes RNV podía ser escuchada en cinco ciudades del país y ahora ocupa una buena parte del territorio nacional, lo cual permite a la población recibir información cultural, educativa y formativa con un grupo de analistas incorporados no sólo al canal informativo sino a cada uno de los canales (Clásico, Juvenil, Musical, Internacional y Región Central) de RNV. Todos ellos con su formato específico.

Con respecto a la parte técnica, Salcedo explica que hace cuatro años se recuperaron 31 señales que se encontraban almacenadas en Conatel y que estaban destinadas para RNV. "Cuando nos da la instrucción el ministro —en ese momento— Jesse Chacón para que instaláramos las emisoras, empezamos a partir de entonces a regar más la señal de RNV para todo el país. Sin embargo, no era suficiente pues era brevísima la capacidad informativa que teníamos".

"Progresivamente se fueron incorporando nuevas frecuencias las cuales nos han permitido atender a una buena parte de la población, aún cuando no se ha logrado el objetivo de llegar a todo el país".

En lo que respecta a contenidos, lo más importante para la responsable de RNV ha sido el fortalecimiento del análisis, el cual permite la formación y la participación de las personas. "El análisis, político, internacional e ideológico, es fundamental. Esto tiene una carga muy importante para la construcción del socialismo, separándonos obviamente del sistema capitalista".

"Cabe destacar que desde RNV se hace una interacción importante con los usuarios. Una de esas interacciones está en los muchos programas que se han hecho en la calle conjuntamente con las comunidades. Por ello la necesidad de crear más emisoras locales para que la radio se acerque más a nuestro pueblo. Eso rompe con los esquemas de las radios privadas que sólo te colocan música o discursos sesgados totalmente de espaldas a la realidad".

Dificultades
Salcedo confiesa que las etapas más difíciles en los últimos años fueron cuando Venezuela sufrió el paro petrolero y empresarial. "Esos fueron momentos incómodos para los trabajadores de la radio. Primero que en esa situación no teníamos la capacidad que poseemos ahora, entonces era una capacidad muy breve para contrarrestar esa campaña de odio y terrorismo que mantenían los medios de comunicación privados".

"Pero eso nos permitió analizar la importancia que tiene un medio, la importancia que tiene el mensaje, y, sobre todo, un mensaje que esté apegado a la veracidad y eso es lo que nos ha permitido gozar de la credibilidad dentro del pueblo venezolano; dentro de esa población sensata, que en ningún momento ha sido afectada por los mensajes programados de manera perversa para distorsionar la realidad, emanados desde Globovisión, El Nacional, Unión Radio, entre otros".

Terrorismo mediático
La experimentada comunicadora indica que la guerra psicológica siempre ha estado presente. "Por supuesto, ahora la han activado con nuevos mecanismos de programación mental que anteriormente no tenían, pues antes era más fácil porque ellos mentían y tergiversaban y luego venía nada más que el desmentido y el derecho a réplica. Pero, ahora existe toda una programación que ha llevado a cabo Globovisión, Rctv y otros para trabajar la mente de la gente".

Considera que los medios trabajaron con mensajes destinados a cambiar a una población, que era, según sus propias palabras, bastante tranquila, en donde se toleraban comunistas, masistas y adecos; ahora a esa parte de la población la han volcado totalmente contra el presidente Chávez y el proceso de cambios.

"Existen investigaciones que determinan claramente cómo trabajaron las mentes de las personas. Investigadores, como el doctor Ediberto González y Fernando Bianco junto a un grupo de especialistas han demostrado cómo los medios se ocupan para crear terrorismo".

"Un ejemplo de ello es la campaña que mantienen algunos medios privados sobre la supuesta violación de la propiedad privada, articulada por una organización llamada Cedice. Esta gente recibe dinero de la señora Clinton, de grupos foráneos como la CIA y es una muestra clara de la mentira y el terrorismo mediático ejecutados por estos factores (…) Lamentablemente, la clase media, la cual ha sido muy beneficiada de estas políticas del proceso, es víctima de la mentira.

Latifundio mediático
Al respecto del llamado latifundio mediático, Salcedo está convencida que con las acciones del Estado "ahora sí se le está colocando el cascabel al gato". "Era fundamental hacer una revisión del espectro radioeléctrico. Desde hace mucho tiempo está esa demanda planteada. Era tan importante está acción que de ese examen salió el caso de 240 emisoras de radio que están ilegales".

"Lo más extraño es que los ausentes al acto de revisión del órgano rector, Conatel, lo que hicieron fue encerrarse en sus corazas y decir que se les está cerrando el medio, y peor aún, que se les viola la libertad de expresión. Lógicamente, no se trata de cierre, se trata de una revisión que hace Conatel lo cual satisface a la población venezolana pues por fin se pone orden en el asunto.

"En el caso de las radios, el sector privado, en pocas manos, posee el 90 por ciento del espectro. Es decir, ni el Estado posee una parte fundamental que es lógica para la defensa de la soberanía nacional y la defensa del espacio radioeléctrico.

"Tenemos un caso que ponemos por ejemplo. En el estado Táchira se ubica una radio que su señal, de RNV, ha sido interferida por el Ejército colombiano. Ahora se tomaron medidas y se movieron esos transmisores; sin embargo, continúa la señal del Ejército colombiano presente en ese estado. Esa es una clara violación del espectro radioeléctrico y esa es una materia que compete al Estado venezolano. Por eso es fundamental la señal de RNV allí, es cuestión de soberanía."

Señala que estos aspectos no son comprendidos por los que poseen una buena parte de la tajada del espectro radioeléctrico, pues sus intereses son el lucro y el derrocamiento del Gobierno a través de la permanente desestabilización. Es ese sentido, argumenta que es necesario informar debidamente a la población sobre la verdadera intención de la reorganización del espacio mediático.

Con relación a algunos señalamientos de la oposición sobre el supuesto desempleo que generaría la medida de retirarles las concesiones a ciertos operadores, Salcedo apunta que muchos trabajadores que están ganando salarios vejatorios podrían favorecerse con la entrega de las concesiones directamente a ellos.

Periodismo Necesario
A Helena Salcedo parece encendérsele los ojos, semejantes a los de un poeta cuando la musa llega en el momento preciso, cuando le hablan del oficio del periodismo. Y es que para ella la sola palabra se le debe respeto como a un preciado talismán. Suspira tal cual lo haría un enamorado ante una carta de su media naranja, cuyas letras llenan con avidez un espacio vacío.

— ¿Cuál es su visión sobre el actual ejercicio del periodismo venezolano?
— En verdad veo un momento crítico. Por esa razón formo parte de un grupo que ya tiene un año llamado Movimiento Periodismo Necesario, en el cual nos hemos empeñado en estar permanentemente realizando cursos y talleres a nivel nacional con el fin de animar a los trabajadores de la prensa en esta discusión. Todo con el fin de rescatar al periodismo. Ese periodismo como se hacía antes, que ha sido pisoteado por muchos que hoy se hacen llamar periodistas.

"Eso porque numerosos supuestos periodistas dejaron el ejercicio de la profesión para dedicarse a ser unos actores más de la desestabilización de la mano de Ravell, de Enrique Otero, de Marcel Granier. Pero, existe una situación que muchos han pasado. Por ejemplo, el caso de José Domingo Blanco —Mingo— que era seguidor de esa línea, pero tuvo unas diferencias con Ravell e inmediatamente fue botado del canal. Eso sucede porque los intereses de Ravell y compañía son totalmente diferentes a los intereses de los trabajadores de la prensa. Eso es lo que no han entendido algunos periodistas".

A decir de Salcedo, la profesión periodística hoy es afectada por la falta de investigación que sustenten los trabajos y más bien una buena parte de los comunicadores se basan en acusaciones por puros "rumores y chismes", algo que, a su juicio, no tiene justificación alguna.

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