sábado, 22 de agosto de 2009

El caso de la Cadena Capriles y Ávila TV: Ya entendí por qué Lina Ron lanzó la lacrimógena

Dejo los enlaces a dos excelentes artículos de El Tano y de José Roberto Duque, en torno a los hechos del pasado jueves en la Av. Urdaneta frente a la sede de Ávila TV, uno de los múltiples lugares donde hubo hechos de violencia en el centro de Caracas, propiciados por grupos de choque de la oposición en contra de la Ley Orgánica de Educación.
Me alegra mucho que finalmente hayamos visto en VTV a algunas figuras, como Aristóbulo Istúriz, Mario Silva y los Pelúos, romper con el ya molesto discurso oficialista que mantenían otros dirigentes que desde el jueves, sin tener idea de lo que ocurrió en el centro de Caracas, se limitaban a emitir comunicados "rechazando los hechos" y llamando a aplicar todo el peso de la ley a quienes atacaron al grupo de palangristas de la Cadena Capriles, ignorando a aquellos que iniciaron la violencia ese día, y cuál era el macabro plan que sostenían.
Al fin se dice claro y raspado que ese día quienes iniciaron la violencia fueron los opositores: la gente de Bandera Roja, de AD, de 100% Estudiantes, que promovieron disturbios en cinco o seis puntos distintos del centro de Caracas. Los empleados de la Cadena Capriles, por muy Licenciados en Comunicación Social que sean, simplemente formaban parte de ese plan.
Eso no justifica la violencia o los golpes contra ellos, pero la violencia, como bien indica El Tano, no es sólo física. Esto también es violencia:
Los jóvenes de Ávila TV mostraron este lunes en La Hojilla esta foto de la Cadena Capriles, donde aparece (en el centro y con franela gris) Gabriel Uzcátegui, el único detenido e imputado por los hechos del jueves, siendo agredido por quienes parecieran ser periodistas de la Cadena Capriles.Últimas Noticias publicó esa misma foto, pero recortada para que no se vieran dos de las personas allí mostradas. Cuando se usa el poder mediático para denigrar de alguien, eso también es violencia. Cuando los periodistas de la Cadena instigan indirectamente al odio contra los trabajadores de Ávila TV, eso también es violencia.Dejo un fragmento del artículo de El Tano.
Entendiendo que uno no debe tomarse la justicia en su mano, bueno sería que ese tipo de violencia tan usada por los distinguidos señores escuálidos, también tuviera un castigo, o por lo menos entender tal acción como un atenuante de quien, por cariño al presidente, actúa por la vía física y cae en la provocación.También sería bueno, en ese caso, enseñarle a ambos bandos a conducirse por la vida como cuando se maneja, es decir, a la defensiva, porque, como no somos suizos, no es raro que la gente en este país se enfrente por algo, como ser, por ejemplo, el Magallanes y el Caracas. Yo por ejemplo no le hubiera recomendado a un hijo mío ir a repartir volantes a la Plaza Altamira cuando ellos tenían allí su tarantín y su escándalo, por mucho que hubiera sido legal y cívico, manifestarse en contra. Porque, salvo que tuvieras ganas de buscarte problemas, lo lógico era mantenerse lejos de allí, a riesgo de que nos pase lo que le sucedió a un señor que sacó la cabeza por la ventanilla de un autobusete y les gritó escuálidos tales por cuales, con tal mala suerte que en la esquina el semáforo en rojo paró al vehículo y entonces un grupo de manifestantes de la Altamira lo alcanzaron, lo bajaron a golpes del autobusete, y le dieron criminal paliza ya en la calle. Sería bueno que en esta investigación aprovecháramos de meter presos también a esos escuálidos desquiciados y agresores de ese chavista que no tuvo el "criterio" de manejar a la defensiva frente a una zona ocupada por la oposición...
Para leer completo el artículo de El Tano, puedes hacer click aquí.
También les dejo un fragmento del artículo del Duque:
Y a estas alturas nadie se atreve a decir en voz alta lo que muchos pensamos: que es verdad que gente nuestra salió a repartir patá y kung-fu, y que es una vaina grotesca que el chavismo oficial pida cárcel para esos compas, como si nosotros mismos no hubiésemos sido nunca víctimas de esa violencia sifrina celebrada por los medios privados, y cuyos perpetradores gozan de total libertad e impunidad.A dejarse todo el mundo de mamagüevadas: sí fueron panas nuestros, chavistas y camaradas de grupos organizados, los que fueron a patearles el culo a unos señores licenciados que por serlo se la dan de intocables. Fue un error que lo hicieran, cómo no. Como también es un error, y este sí malintencionado y revelador de una desubicación acojonante, el que el Consejo Nacional de Comunicador@s Socialistas emitieran un comunicado en el cual se lee esta perla:
"El CNCyCS exhorta al Ministerio Público a realizar todos los esfuerzos necesarios para que se aclare la responsabilidad de quienes hayan cometido estas agresiones y no queden impunes".
A ese comunicado les respondí de la siguiente manera, en correo colectivo:
"Supongo que es obligante este tipo de comunicados, para efectos de la organización pulcra, mesurada y decente que quiere ser el Consejo. Sólo quisiera que el Consejo se dignara medir muy bien el alcance de su llamado a meter presos a camaradas nuestros, sobre todo cuando las acciones de la derecha recrudecerán y no será con discursos y comunicados como podremos detenerlos. Va mi declaración irresponsable y sospechosa de ser financiada por la CIA: yo prefiero que nos veamos acusados de haber agredido a unos vergajos de la prensa enemiga y no tener que llorar a nuestros muertos, porque somos arrechísimos pidiendo cárcel para la gente nuestra pero dignos de risa a la hora de pedir justicia por Danilo Anderson, Jairo Gregorio Morán, Oscar Aponte Gómez.
Les propongo este ejercicio: busquen esos dos nombres mencionados después de Danilo Anderson, sin buscarlos en internet. Nadie se acuerda de ellos, ¿cierto?
Pues de ese tamaño es nuestra pérdida de la brújula. Cárcel para quienes golpearon a los señores periodistas ayer, olvido para nuestros muertos. Es decir, cárcel y muerte para nosotros, justicia para el enemigo. Así vamos a ganar la guerra, seguro que sí".
Para leer el artículo completo, haga click aquí.
Periodistas de Ávila Tv, VTV, Vive, RNV y otros medios públicos y alternativos han sido agredidos hasta el cansancio, muchas veces de forma física. Incluso hay grabaciones y fotos, pero ni un sólo detenido. Ojalá y el Presidente Chávez hubiera pedido prisión para Oscar Pérez por las numerosas agresiones que ese señor ha protagonizado contra gente nuestra, muchas de ellas filmadas.
No se ha hecho justicia por ninguno de los hechos de abril y diciembre de 2002, que dejaron a decenas de personas muertas. Ni a los muertos que la PM dejó durante el infame "gobierno" de Alfredo Peña. Pero sí haremos justicia llevando a prisión a unos chamitos, por el temor al "qué dirá la OEA".
Y si hablamos de delitos cometidos por el canal Globovisión, tenemos que añadir uno nuevo: llevan como 4 días instigando a la gente, de forma directa, a desacatar, no cumplir y rebelarse contra la Ley Orgánica de Educación. ¿Ahora se puede hacer apología del delito en los medios de comunicación impunemente? ¿Saben por qué Lina Ron le lanzó una lacrimógena a Globovisión? Porque, en medio de su rabia, asumió que, así como el gobierno no le hace nada a Guillermo Zuloaga luego de que viéramos de forma pública y notoria a éste desobedeciendo la ley, acaparando carros y reconociendo ser un usurero, igualmente ella asumió que podía hacer lo mismo sin que nada le pasara. Se equivocó, porque lamentablemente el Estado aplica la ley rápidamente a la gente pobre y común, pero tiene miedo de aplicarla cuando quien la viola es un opositor, o un miembro del club de los poderosos.¡Terminen de cerrar a Globovisión, medio que viola todos los días como 40 leyes, y luego veremos si Uzcátegui merece prisión o no!
Etiquetas: avilatv, política

14 de agosto de 2009
El centro tomado por decenas de grupos de choque, y los periodistas chavistas apoyando a la oposición
Me parece lamentable que periodistas y comunicadores sociales que tienen años luchando por este proceso, estén siguiendo al pie de la letra la matriz de opinión que impone la oposición, sin averiguar primero qué pasó.Este jueves la oposición radical, que aparentemente ha mejorado sus asesores, ejecutó un plan para causar caos en el centro y evitar la aprobación de la Ley de Educación: Hizo que decenas de pequeños grupos opositores se repartieran en el centro de Caracas, desplazándose a pie o en Metro, con el fin de crear caos generalizado y confrontar la gigantesca marcha de más de 20 mil revolucionarios y revolucionarias apoyando la Ley Orgánica de Educación.
Desde temprano, pequeños grupos de opositores llegaban a la plaza Bolívar y los alrededores del Palacio Legislativo, sede de la Asamblea Nacional, donde también habían decenas de bolivarianos apoyando el proyecto de Ley. Un pana me contó con preocupación que chavistas y opositores estaban lado a lado, discutiendo con mucha agresividad entre sí en torno a la Ley Orgánica de Educación. En los videos proyectados por Ávila TV y La Hojilla este jueves podía verse algo de esto.
Me encontré a muchos opositores en Metro, desplazándose acompañados de camarógrafos de medios privados y bajándose en diferentes estaciones. No iban a un mismo lugar, sino a muchos puntos distintos.
Posteriormente, quien escribe fue testigo directo de cómo pequeños grupos antichavistas liderados por Bandera Roja llegaron a la esquina de El Chorro, apenas a 100 metros de la marcha revolucionaria, esto minutos antes del mediodía. La Policía Metropolitana tuvo que interponerse entre el grupo de Bandera Roja y la marcha de más de 20 mil revolucionarios para evitar que se confrontaran; los policías lanzaron bombas lacrimógenas a ambos grupos para replegarlos. Me fue posible ver a algunos líderes estudiantiles revolucionarios afectados por los gases, intentando tranquilizar a sus exaltados compañeros, con muchas ganas de confrontar a los banderosos por sus intentos de sabotear la marcha.
Bandera Roja se disolvió y sus miembros se esparcieron por todo el centro de la ciudad, y acompañaron a otros grupos de choque. Otros grupos opositores hicieron presencia en la Plaza Caracas, el MetroCenter de La Hoyada y un grupo de periodistas opositores hacían acto de presencia en la Av. Urdaneta, entregando panfletos y trancando parcialmente las vías.
Tres testigos coincidieron en contarme de haber visto a decenas de personas en la Av. Urdaneta con palos en la mano, y de algunos gritando "¡saqueo!" y haciendo llamados a la violencia. Nada de extrañar, conociendo las técnicas de Bandera Roja, Acción Democrática y otros grupos violentos.
Parece ser que había un plan muy claro de intentar provocar fuertes desórdenes en el centro de Caracas, tal vez buscando usar la Ley Orgánica de Educación como catalizador para una "revolución de colores".
Este era el clima para nada legítimo dentro de un estado democrático, en el cual un grupo de periodistas opositores del diario Últimas Noticias escogió entregar panfletos en contra de dicha Ley, causando perturbaciones y trancas en el centro, lo que provocó que revolucionarios no identificados los confrontaran. ¿Estaban estos periodistas opositores conscientes del papel que jugaban causando trancas en la Av. Urdaneta y el centro de Caracas? Que cada quien opine.
Creo también que nosotros como revolucionarios tenemos que pensar mejor en la estrategia y táctica ante las acciones de los grupos de oposición, que están cambiando su forma de operar para ejecutar acciones violentas pero muy bien pensadas. A veces, sin querer, causamos un fuerte daño al proceso, y si a eso le sumamos que algunos periodistas revolucionarios terminan siguiéndole la matriz de opinión a los opositores, el daño se agrava aún más.
Quiero aclarar que, si bien estoy de acuerdo con el 99% de los comunicados del Movimiento por el Periodismo Necesario (MPN), no apoyo el más reciente texto emitido por el citado movimiento, emitido creo que en solidaridad, o por la insistencia, o bajo la influencia de Eleazar Díaz Rangel, a quien por demás admiro y apoyo.
Estoy en desacuerdo con el comunicado, no porque yo apoye la violencia, sino porque sólo muestra una realidad de los hechos y no condena que periodistas dejen de lado su profesionalismo para unirse a grupos de choque en un plan que no tenía nada de pacífico, de legítimo ni de democrático. Tengo muchas amistades en ese grupo, pero hace meses que dejé de formar parte del mismo porque prefiero esperar a que aparezca uno donde haya más protagonismo de comunicadores comunitarios y alternativos, entre quienes yo me cuento.
El Estado tiene un papel muy importante para evitar que la violencia se generalice y vayamos a una guerra civil. Desde antes de 2002, los medios de comunicación privados afectan la salud mental de millones de personas. Manipulan. Mienten. Tergiversan. Familias y amistades se rompen. Parejas se divorcian. Algunos que viven en zonas opositoras temen vestir o usar símbolos del chavismo, por temor a ser identificados o atacados.
Contemos la cantidad de personas afectadas por la influencia dañina de los medios de comunicación masivos. Y añadamos delitos mediáticos con consecuencias más trágicas, como el asesinato del líder político Jorge Nieves a manos de paramilitares, luego de que el "periodista" Roberto Giusti lo acusara de ser líder de un grupo guerrillero.

Me pregunto en qué estamos pensando cuando nos preocupamos con tanta celeridad en aplicar la ley a quienes lancen una bombita lacrimógena que hizo llorar a 5 personas, pero en cambio tardamos más de siete años en aplicar sanciones contundentes a medios que, en cualquier otro país del mundo, hubieran sido sancionados en abril o en diciembre de 2002 por afectar la salud mental y la vida cotidiana de más de 27.000.000 de personas.

Primer objetivo, AVILA-TV…y el segundo objetivo, ¿Eleazar Díaz Rangel..?
Por: El Tano Fecha de publicación: 17/08/09

"Yo sé que quienes cayeron defendiendo el honor / fueron los nuestros..."
Pablo Neruda.
Según dice el último párrafo de la nota de ayer domingo en las páginas 8-9 de "En Domingo", de Ultimas Noticias, las investigaciones de la Fiscalía se encaminarían a saber qué hizo cada quién en el escándalo de esquina de Veroes y la Avenida Urdaneta...
Buen punto, porque generalmente cuando hay un enfrentamiento entre dos grupos, por ambos lados se dicen, por lo menos, cosas, cuando no ambos grupos se caen a piñas, cosa que en este caso la prensa parece cargar sólo a los chavistas, como si los agredidos fueran mochos o, por lo menos, habrían tenido la inteligencia política de aguantar estoicamente, para ser, a la hora del recuento, las víctimas.
Aún siendo al parecer innegable que los nuestros tuvieron la desinteligencia de zumbar algunos palos, es bueno señalar que la violencia no sólo es física, también es verbal, y en este tipo de casos, muchos chavistas hemos tenido que soportar que un energúmeno, porque está en su tienda, por ejemplo, le mente la madre al presidente, diga que es un maldito, un ladrón y luego declare que si alguien no lo mata el mismo va a matar a ese desgraciado...
Entendiendo que uno no debe tomarse la justicia en su mano, bueno sería que ese tipo de violencia tan usada por los distinguidos señores escuálidos, también tuviera un castigo, o por lo menos entender tal acción como un atenuante de quien, por cariño al presidente, actúa por la vía física y cae en la provocación.
También sería bueno, en ese caso, enseñarle a ambos bandos a conducirse por la vida como cuando se maneja, es decir, a la defensiva, porque, como no somos suizos, no es raro que la gente en este país se enfrente por algo, como ser, por ejemplo, el Magallanes y el Caracas. Yo por ejemplo no le hubiera recomendado a un hijo mío ir a repartir volantes a la Plaza Altamira cuando ellos tenían allí su tarantín y su escándalo, por mucho que hubiera sido legal y cívico, manifestarse en contra. Porque, salvo que tuvieras ganas de buscarte problemas, lo lógico era mantenerse lejos de allí, a riesgo de que nos pase lo que le sucedió a un señor que sacó la cabeza por la ventanilla de un autobusete y les gritó escuálidos tales por cuales, con tal mala suerte que en la esquina el semáforo en rojo paró al vehículo y entonces un grupo de manifestantes de la Altamira lo alcanzaron, lo bajaron a golpes del autobusete, y le dieron criminal paliza ya en la calle.
Sería bueno que en esta investigación aprovecháramos de meter presos también a esos escuálidos desquiciados y agresores de ese chavista que no tuvo el "criterio" de manejar a la defensiva frente a una zona ocupada por la oposición...
Me pasó a mi mismo un día en que por Copa Libertadores el Caracas Fútbol Club enfrentó a un equipo visitante. Por comodidad, para ver mejor el partido, me quedé en el centro de las gradas, entre la gente de la furibunda y grosera barra del Caracas, al fin y al cabo, ninguno de los dos equipos son de mi preferencia, yo fui por ver buen fútbol y ya (yo soy del Zamora Fútbol Club…). El equipo visitante, no hizo ningún gol, pero si lo hubiera hecho, algún partidario de ese equipo allí en esa parte del Universitario tendría que celebrarlo en silencio, buscando no provocar, no enardecer a sus vecinos, aún cuando la ley estuviera de su lado, y ya que se quedó entre los caraquistas y no se fue para allá lejos, detrás del arco norte.
No hay ninguna ley que prohíba a una bella joven ir de visita a una cárcel con una cortita minifalda y una blusa de amplio escote. Pero la mamá de la muchacha y el sentido común le aconsejarían ser un poco más criteriosa y hacer la visita eligiendo su ropa de manera más consciente, manejando a la defensiva... Cuestión de criterio, de saber vivir, salvo, claro, que tengamos ganas de crear problemas, de provocar situaciones complicadas.
Tampoco manejaron a la defensiva los amigos chavistas, alguno de ellos integrante del colectivo de Ávila-TV, un canal que ha dado sobradas muestras de ser capaz de intercambiar ideas y verdades, por muy duras que estas sean. Lo más triste al respecto es verificar que el exabrupto de la camarada Lina Ron, unos días antes en Globovisión, no nos sirvió de experiencia alguna. No hubo el cuidado de manejar a la defensiva en la esquina de Veroes y el enemigo salió ganando políticamente, aún cuando haya perdido la pelea de los golpes...
Políticamente imperdonable, ni más ni menos, si vemos el escándalo que nos han armado y el día en que la noticia debió ser la aprobación de la nueva Ley Orgánica de Educación, unas patadas y unos batazos nuestros, sirvieron para opacar la situación, dejándonos una vez más a la defensiva, detrás de los acontecimientos, mientras ellos ponen la agenda.

Sin embargo, el balance político entre nos, la autocrítica, pues, no exime al enemigo de responder por sus propias culpas, y de reconocer los beneficios que tuvieron al enfrentarse a un grupo de chavistas, porque si no se han dado cuenta, salieron ganando en comparación de otros grupos de oposición... Porque hay antichavistas que han tenido diferencias de opiniones con otro grupo de la misma oposición, y por ello hoy cuando menos la familia de una muchacha universitaria de LUZ está llevando el luto de haberla perdido, asesinada por balazos en un enfrentamiento entre gente de Un Nuevo Tiempo y otros de Primero Justicia, allá en El Zulia. No es primera vez que eso pasa, desde los cabilleros de los adecos para acá. La familia de esa muchacha, por supuesto que deseará que su niña se hubiera enfrentado a chavistas, porque los chavistas no asesinan a sus adversarios políticos.
O, el caso más sonado, cuando la marcha del 11 de Abril hacia Miraflores. Algunos iban, cual estos empleados de la Cadena Carriles, repartiendo volantes, cuando sus propios dirigentes los emboscaron con sus francotiradores (“Y no hay unidad de acción posible... con quienes no tienen miramientos a la hora de sembrar la duda sobre la Coordinadora, mintiendo descaradamente, con los que puedan tomar cualquier decisión (como por ejemplo, también disparar sobre la marcha del 11 de Abril) con tal de llevar adelante sus planes…” Elías Santana, en el N° 327 del Semanario “Quinto Día”, pág. 42).
Es decir, por donde lo vean, los escuálidos están más seguros en un enfrentamiento con los chavistas, que “compartiendo” con sus colegas opositores…
Distinta es la cosa cuando hay roces con los chavistas, y los nuestros son minoría. Un joven padre de familia que construía su petrocasa dejó a mujer viuda e hija huérfana cuando una turba opositora le cayó a tiros a un grupo de bolivarianos. Eso pasó aquí mismo, en Valencia, para una de las últimas elecciones.... Hace sólo semanas por la misma zona enterramos a un dirigente estudiantil bolivariano y a otro joven por allá por Bolívar... y la lista, que suma y sigue, es larguísima..
Los ejemplos sobran y en el balance es espantoso comprobar cómo ha corrido la sangre de los nuestros, de los revolucionarios. Ojalá Últimas Noticias le hubiera dado esas columnotas y esos titulares a cada uno de los más de doscientos líderes campesinos asesinados, camaradas que no cayeron por alguien a quien se le pasó la mano en un batazo, sino por balas, por financiado y preciso sicariato.
Es más: hace algunos meses el Cicpc logró esclarecer los primeros dos casos de dirigentes campesinos asesinados, con sólo unas semanas de separación. Cuando un país ha vivido la escandalosa tragedia de la impunidad en más de doscientos asesinatos, la solución de dos casos, deteniendo a los ejecutores e identificando a los autores intelectuales, bien merecía un buen titular, una secuencia de fotografías, ¡por lo menos una monografía!, compañeros de Ultimas Noticias...Pero no.

El énfasis, el goce casi morboso de gráficas sobre un hecho donde, si vamos a ver, nadie fue atacado por ser periodista, sino porque se armó una trifulca entre unos chavistas que andaban en plan de marcha permisada y otros que con arrestos de contramanifestantes promovían a punta de volantes el continuar con la violencia reaccionaria de un sistema educacional que promovió, facilitó y estimuló la violencia de la exclusión hacia las niñas y niños pobres y hacia las muchachas y los muchachos pobres de este país.
Este proceso revolucionario se ufana de ser pacífico, pero en realidad de pacífico sólo tiene la forma en que el pueblo ha estado sacando a sus enemigos del poder, a lo más dándole un batazo aquí y un coñazo allá, mientras la sangre la ha seguido poniendo el pueblo, la han seguido vertiendo los pobres, regando con ella tan generosa como injustamente la tierra patria.

En este caso de los empleados de la Cadena Capriles, no sabemos si la oportunidad se la encontraron a la vuelta de la esquina, por casualidad, y aprovecharon bien la ocasión... O es que todo lo premeditaron y les salió de pinga. Porque lo cierto es que agarrados de la imprudencia de unos y la tontería de otros, ahora quieren comer cochino en grande, apuntando al corazón de Ávila-TV y, de paso, provocando una situación interna en Ultimas Noticias como para deshacerse del demasiado objetivo y demasiado periodista digno y honesto, el incómodo Eleazar Díaz Rangel, director de ese periódico, si éste no entra en el juego de tratar un enfrentamiento de calle con más énfasis que el que se le daría a la Declaración de Guerra a Muerte contra españoles y canarios.
Felizmente en AVILA-TV hay claridad de proyecto, un equipo con capacidad y guáramo y una teleaudiencia que no permitirá le vengan a fregar a su canal caraqueño y contestatario.
Felizmente Eleazar Díaz ha dedicado su página de este domingo, como de costumbre, a los grandes problemas que atañen a este país, como las bases gringas en Colombia, con su arsenal de violencia contra los pueblos de América, y sólo en un tips ha dejado la cuestión en manos de las autoridades, a la espera de castigo.
Con lo cual estamos de acuerdo, si las investigaciones así lo determinan. Aunque bien malo sería, que estos contramanifestantes, por haber sido agredidos, ahora sobreexaltados en su condición de periodistas, merezcan la atención de las autoridades a todo nivel, por sobre otros casos pendientes.No. Sólo será justo que estos chavistas paguen su culpa si a su vez van a la cárcel todos los agresores anteriores, por ejemplo, el Cabeza de Motor cuando golpeó al Carlos Pollo de Ávila-TV; por ejemplo, el que le dio un puñetazo a mansalva a Cabeza de Mango mientras éste ocupaba sus manos sosteniendo una cámara... por ejemplo, la larga lista de agresiones impunes donde los nuestros han sido mancillados sin merecer ni los titulares de primera ni las páginas centrales de un suplemento estrella de Ultimas Noticias.


¿Que hay que terminar con la violencia? ¡De acuerdo! Pero que la ley sea pareja, para que no sea dura para nosotros y blandita para ellos. Cuando las pérdidas del paro petrolero, cuantiosa para todo el pueblo, ninguno de los que generaron esa violencia fue despojado de su patrimonio personal para suavizar las pérdidas de la nación... Ni cárcel ni embargo, nada. Más bien fueron premiados de impunidad. Ya basta de la Ley del Embudo... Exijámosle a los nuestros, a esos pequeños grupos de chavistas que parecen gozar de los enfrentamientos, que no sigan siendo los tontos útiles al servicio de los intereses de los enemigos del pueblo venezolano, que entiendan que, en política, muchas veces hay que actuar como en el chiste del masoquista y el sádico: el masoquista: pégame, pégame... el sádico: no te pego, no te pego...
El gobierno, puesto en situación incómoda por algunos de sus propios partidarios, no puede sino apoyar la investigación y el castigo a los culpables, como siempre lo ha hecho, por lo demás. Pero nosotros, como pueblo manifestante que patea las marchas y se expone a los enfrentamientos, podríamos aspirar a un acuerdo "de caballeros" con la contraparte escuálida; si quieren ellos también que de verdad cese la violencia.
Así que, en cuanto a los hoy agraviados de la Cadena Capriles, ya que tienen tantas ganas de investigar, que nos ayuden para que los agresores de hechos anteriores, sus compinches escuálidos, se entreguen a la policía, que si es así nosotros llevaremos con gusto a los nuestros al tribunal que corresponda.
Porque lo que es bueno para la pava es bueno también para el pavo.
Sobre todo si la pava es escuálida y el pavo rojo rojito.


Uno se siente medio pendejo cuando, en casos como el actual, se pone a recordarles a los demás que todos cometemos errores. Y que cuando uno los comete de buena fe, por exceso de voluntarismo o pundonor, o porque sencillamente tenemos una visión medio cinematográfica de lo que es el combate contra el mal, quienes se dicen camaradas de uno no pueden atribuirle el error cometido a perversidad o a que uno es un contratado de la CIA. Unos compas chavistas-no oficialistas, voluntariosos ellos, cometieron un error táctico de mediana a alta gravedad la semana pasada, cuando fueron a caerles a palos a unos desestabilizadores que se lo merecían, pero que al salir golpeados salieron ganando la batalla de la opinión pública. Lo increíble, en la continuación de la comedia, viene empaquetada en monstruo de dos cabezas:
1) El chavismo oficialista, empezando por Chávez y el Minci, pasando por el Consejo de Comunicadores Socialistas y aterrizando en el PSUV, han pedido cárcel para los camaradas que participaron en la golpiza.
2) Los señalados han salido a defenderse con argumentos que jurídicamente están bien, pero...: "Nosotros no le pegamos a nadie".
Y a estas alturas nadie se atreve a decir en voz alta lo que muchos pensamos: que es verdad que gente nuestra salió a repartir patadas y kung-fu, y que es una vaina grotesca que el chavismo oficial pida cárcel para esos compas, como si nosotros mismos no hubiésemos sido nunca víctimas de esa violencia sifrina celebrada por los medios privados, y cuyos perpetradores gozan de total libertad e impunidad. A dejarse todo el mundo de tonterías: sí fueron panas nuestros, chavistas y camaradas de grupos organizados, los que fueron a patearles el trasero a unos señores licenciados que por serlo se la dan de intocables. Fue un error que lo hicieran, cómo no. Como también es un error, y este sí malintencionado y revelador de una desubicación total, el que el Consejo Nacional de Comunicador@s Socialistas emitieran un comunicado en el cual se lee esta perla:
"El CNC y CS exhorta al Ministerio Público a realizar todos los esfuerzos necesarios para que se aclare la responsabilidad de quienes hayan cometido estas agresiones y no queden impunes".
A ese comunicado les respondí de la siguiente manera, en correo colectivo:
"Supongo que es obligante este tipo de comunicados, para efectos de la organización pulcra, mesurada y decente que quiere ser el Consejo. Sólo quisiera que el Consejo se dignara medir muy bien el alcance de su llamado a meter presos a camaradas nuestros, sobre todo cuando las acciones de la derecha recrudecerán y no será con discursos y comunicados como podremos detenerlos. Va mi declaración irresponsable y sospechosa de ser financiada por la CIA: yo prefiero que nos veamos acusados de haber agredido a unos verdugos de la prensa enemiga y no tener que llorar a nuestros muertos, porque somos muy bravos pidiendo cárcel para la gente nuestra pero dignos de risa a la hora de pedir justicia por Danilo Anderson, Jairo Gregorio Morán, Oscar Aponte Gómez.
Les propongo este ejercicio: busquen esos dos nombres mencionados después de Danilo Anderson, sin buscarlos en internet. Nadie se acuerda de ellos, ¿cierto?
Pues de ese tamaño es nuestra pérdida de la brújula. Cárcel para quienes golpearon a los señores periodistas ayer, olvido para nuestros muertos. Es decir, cárcel y muerte para nosotros, justicia para el enemigo. Así vamos a ganar la guerra, seguro que sí".

***
Ya antes, cuando Chávez acusó al Grupo de Trabajo La Piedrita de trabajar para la CIA, se lo espetaba al chavismo oficialista y al propio Chávez (clic aquí): todos cometemos errores pero hay quienes sólo le otorgan el derecho de equivocarse al comandantísimo Hugo Chávez (después se molestan porque los tildan de aduladores). Pero si cometer un error o un exceso en las batallas contra el enemigo es una prueba de infiltración de ese mismo enemigo entonces a “ponerse las pilas”, chavistas de todo pelaje, porque el camarada Presidente se la pasa “poniendo la torta” y mire que sus palabras y acciones también las usa el enemigo para echarnos golpes a todos. ¿Quién es el que va a acusar a Chávez de recibir instrucciones de la CIA? ¿A que nadie en el chavismo oficial se atreve a “ponerle el cascabel al gato”?
A mí no me importa que a estas alturas del campeonato la gente empiece a mirarte con aire de sospecha cada vez que llamas a las cosas por su nombre. Total, si mal no recuerdo es lo que he hecho toda la vida y no pienso dejar de hacerlo. Va otra vez, a modo de síntesis. Los periodistas antichavistas son unos cínicos cuando exultan y se desgarran en voces de alerta porque les dieron unos golpes a varios de ellos, siendo que ellos mismos han ninguneado a nuestros asesinados y golpeados: remember Oscar Aponte Gómez y Jairo Gregorio Morán, 3 de enero de 2003.
Los camaradas nuestros que salieron a golpearlos son unos irresponsables, sobre todo por haberlo hecho en un tiempo de alta sensibilidad política como el actual. Los señores del Consejo de Comunicadores Socialistas son también unos irresponsables y unos entreguistas al pedir cárcel para los nuestros, bajo el argumento de que los revolucionarios dizque amamos la paz. Tanto los periodistas "nuestros" como los de ellos caminan por una misma vereda y su tufillo es a atavismo de clase: unos y otros olvidan o no quieren recordar que a una reportera de Ávila TV le estallaron un niple en la cara unos manos blancas, y que no hay ni habrá nadie preso por ello. Mayor escándalo se hubiese armado en este país si semejante atentado se hubiera llevado a cabo contra un señor licenciado de cualquiera de los bandos, compadre.
Remedio contra todo esto: ubicación (clic aquí). Recordar de dónde viene cada quién, a qué nos debemos y a qué hemos sido convocados en tiempos que quieren llamarse revolucionarios.

Enviado por candela socialista

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